Por: Isaac Oré
Me matriculé a la famosa academia Cesar Vallejo, donde la matemática es el rey, y las ecuaciones reinan cada salón, donde no importa la incomodidad de esas banquitas tan feas, tan simples, tan monces, tan cagadas.
Postulé a la UNI, no podía dormir, mi mente era una caos, llegue temprano compre mi lápiz 2B y me encerré en ese examen, súper complicado, me embarque en ese examen estilo NASA, con aritmética a 110%, así fueron los tres días restantes, al momento de ver los resultados, estaba nervioso, me meaba, me temblaban las piernas me baje en Habich para caminar y de paso fumar el cigarrito respectivo, ingeniero tenía que ser, el resultado era el esperado, no ingrese - por un punto -, detesto decir "no ingrese por un punto", porque eso no te hace menos bestia que los demás, pero cada uno sabe su huachafería.
Postulé a la fichísima Universidad del Pacifico, fui a comprar mi prospecto, era un desfile de modas, chicas bonitas, chicos surf, y yo todo flaco, pidiendo a gritos que alguien me pare bola, una chica me ayudo, bien bacán ella, di mi examen de admisión, terminé el examen en 40 minutos, me paré y todos me miraron, la entrevista fue complicada, dije que vivía en Barranco, que no tenía dinero para pagar la exuberante pensión, el gringo me miró con cara de “por las huevas es“, y no ingresé.
Decidí postular a la Cayetano Heredia...
http://isaacorepapeles.blogspot.com/2010/03/ingrese.html
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